Cuando alguien quiere superarse, estudiar y avanzar en la vida, no hay excusas que se lo impidan hacerlo. Guido Acosta (22) es un ejemplo claro de ello. Muestra de sacrificio y fortaleza, el joven dejó en claro que todo se puede, si uno se propone. Hace 4 años la vida le regaló lo más maravilloso que a un hombre le puede pasar: Ser papá. Y su vida cambió por completo, al igual que sus obligaciones.
Ayer miércoles, Guido tenía que rendir dos exámenes de la carrera de Ingeniería Agropecuaria de en la Universidad Nacional de Pilar. No tenía con quién dejar a su pequeña hijita porque su mamá también iba a estar ocupada, por lo que no dudó en llevarla con él a las aulas de la Facu y rindió con su hija a lado.
Alguien dentro de la clase capturó la imagen con su celular y con permiso del joven, alzó la foto en Facebook y…
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Fuente: Diario Crónica PY – www.cronica.com.py