El agua, el pasto, los zapatitos y la cartita. Cuatro elementos infaltables en las noches del 5 de enero en todo hogar que se jacte de amar a un niño.
Ningún dinero en el mundo puede pagar esa sonrisa y ese brillo en los ojos, cuando a pequeñitos de todas las edades se les cuenta que los Reyes Magos vendrán del Oriente montados en sus camellos, a dejarles ese regalo que han soñado.
Incluso ya siendo adultos no se nos olvidan esas cosquillas en la panza y ese insomnio antes de acostarnos, la noche en la que sabíamos que al amanecer, encontraríamos nuestro regalito en la ventana.
Ayudantes de los Reyes
Por si los Reyes tienen mucho trabajo y no les da tiempo de pasar por los hospitales, los doctores de la Fundación Payasonrisa están listos y prestos para donar su tiempo y ser los Reyes Magos vestidos de blanco, que lleven magia e…
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Fuente: Abc Color – www.abc.com.py