Los auditores analizaron la contratación vía excepción para construir una sala de dirección en la Escuela Básica Isla Ita de Benjamín Aceval que costó G. 300 millones. La Contraloría comenzó con la fiscalización de la obra tras una denuncia ciudadana, que fue anónima, que indicaba que se “direccionó” la obra hacia una empresa.
La CGR indicó en su informe final técnico que un solo funcionario fue parte del “equipo de evaluación”; esa misma persona también se…
Leer la nota completa: Aquí
Fuente: Abc Color – www.abc.com.py