Fue lo máximo estar en tu pandilla, el más extraño y brillante producto del azar que hayan visto Ñemby, Lambaré, Pinozá y vastos alrededores en los albores del tercer milenio. Fue lo máximo, aunque no puedo ufanarme de haber sido parte del núcleo de ese grupo extravagante. Yo llegué tarde para eso, mucho después que ustedes. Mucho después del after-punk y las grandes farras de los 80, mucho después de los merodeos por la facultad y de los fanzines Tiempo Indigente y Susobicho,…
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Fuente: Abc Color – www.abc.com.py