
Cerro Porteño, que venía de ganar sus últimos dos partidos de Liga, frenó su recuperación con un empate con sabor a poco que consiguió en Pedro Juan Caballero ante el Sportivo 2 de Mayo, que desperdició una pena máxima que pudo cambiar totalmente el rumbo del compromiso.
UN “GALLO” MADRUGADOR. El dueño de casa cantó bien temprano. Apenas iniciado el cotejo, Diego Acosta rompió el cero con un soberbio golazo; se encontró con un balón en el área rival, se sacó de encima a sus…
Leer la nota completa: Aquí
Fuente: Versus – versus.lanacion.com.py