Cerca de las 4:30 de este lunes, entre 4 personas interceptaron un colectivo de la empresa Ñanduti y, a rostro cubierto y con armas de fuego en mano, comenzaron a despojar de sus pertenencias a los pasajeros, que es su mayoría, se estaban trasladando hasta su lugar de trabajo.
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Con lo que no contaban estos delincuentes es que una de sus víctimas tendría el coraje suficiente para defenderse y evitar que se lleven sus cosas.
Cuando uno de los asaltantes quedó en la puerta de enfrente del colectivo, comenzó a estirar la cartera de la mujer que estaba sentada en el primer asiento y quien, rápidamente, empezó a golpear al hombre con un paraguas que tenía en la mano, evitando así ser robada y obligándolo a descender del bus.
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Fuente: HOY PY – www.hoy.com.py
