La forma más común de contraer piojos es el contacto directo con alguien que los tiene. Los niños que pasan mucho tiempo juntos en lugares cerrados como, por ejemplo, jugando o durante actividades deportivas, están en riesgo.

Los piojos son insectos chupadores de sangre, del tamaño de una semilla de sésamo, y son de color marrón a blanco grisáceo. Se ubican en la piel de la cabeza (cuero cabelludo) y ponen huevos, conocidos como liendres, que se adhieren en el cabello. Aunque es poco común, los piojos se pueden propagar al compartir ropa o pertenencias. Los piojos no vuelan ni saltan, se mueven arrastrándose.

Debido a que los niños juegan tan juntos y, a menudo, en grupos grandes,…