Una verdadera tortura fue la que tuvo que vivir una parturienta para traer a su hijo al mundo. No fue por los dolores de parto, sino por culpa del intransitable camino que no le permitía llegar a una Unidad de Salud Familiar.
La embaraza estaba siendo trasladada unos 300 kilómetros, desde Pozo Colorado hasta la USF de Pedro P. Peña, pero las recientes lluvias hicieron que el nacimiento se convirtiera en toda una odisea.
Este traslado se aproblemó, ya que parte del trayecto se encontraba inundado en Pozo Hondo, una zona de difícil acceso, cuyas condiciones son peores cuando hay lluvia.
Pero, ni todas las dificultades del camino hicieron retroceder al personal de salud que realizaba el traslado y lograron hacer llegar a la mujer hasta el establecimiento de salud donde se realizó un parto exitoso.
En comunicación con la 1020 AM,…
Leer la nota completa: Aquí
Fuente: Diario Crónica PY – www.cronica.com.py