Nada los para. Nada los detiene. La vida de los demás no les importa en lo más mínimo y las ganas de causar perjuicio a otros va más allá que cualquier cosa. Eso es lo que vivieron en el centro de Salud de San Antonio donde unos desgraciados aprovecharon la madrugada, en medio de la lluvia y granizada, para llevar insumos y aparatos médicos al servicio de la gente.
“Un aspirador eléctrico que se conecta para respirar secreciones, era nuevito, un glucómetro que sirve para medir el azúcar, algunos medicamentos de uso cotidiano, dos a tres aerocámaras que se utilizan con los pacientes asmáticos, nuevos también, y una notebook que era de un personal se llevaron. Estamos haciendo inventario para saber qué más falta. Cualquier cosa que nos roben es importante para nosotros porque somos un centro de salud relativamente pobre…
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Fuente: Diario Crónica PY – www.cronica.com.py